OSFED
(Other specified feeding or eating disorder)

Diagnóstico

Las investigaciones sobre la gravedad del OSFED han demostrado que este trastorno es tan severo como otros trastornos alimentarios, con base en los siguientes hallazgos:

• Los adolescentes con OSFED tienen la misma probabilidad de ser hospitalizados que aquellos diagnosticados con anorexia nervosa.
• Las personas diagnosticadas con OSFED presentan una gravedad de síntomas similar a la de otros trastornos alimentarios, así como factores de riesgo cognitivos, genéticos y ambientales comparables a los de la anorexia nervosa, la bulimia nervosa y el trastorno por atracón.
• Las personas con OSFED tienen la misma probabilidad de morir como resultado de su trastorno alimentario que aquellas con anorexia nervosa, bulimia nervosa o trastorno por atracón. Además, un estudio encontró que aproximadamente el 33 % de las muertes atribuidas a los trastornos alimentarios estaban asociadas con OSFED, una cifra más alta que la de cualquier otro tipo de trastorno alimentario.

De acuerdo al  DSM-5 TR, una persona debe presentar conductas de alimentación que causen un malestar clínicamente significativo y un deterioro en su vida, pero que no cumplan con los criterios completos de ninguno de los TCA. En estos casos, se puede asignar un diagnóstico que explique específicamente por qué la presentación no cumple con los criterios de otro trastorno. Algunos ejemplos de OSFED:
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• Anorexia Nervosa Atípica: Se cumplen todos los criterios de la anorexia nervosa, excepto que, a pesar de una pérdida de peso significativa, el peso de la persona se encuentra dentro o por encima del rango “promedio”. Un número creciente de investigaciones ha encontrado que, en comparación con la anorexia nervosa típica, las personas con anorexia atípica experimentan síntomas similares de inestabilidad médica y que una rápida pérdida de peso, independientemente del tamaño corporal, puede provocar complicaciones médicas graves y potencialmente mortales, a menudo asociadas con la desnutrición. Debido a la gravedad de estas consecuencias para la salud, es fundamental que al encontrar signos de anorexia atípica, busquen tratamiento lo antes posible.
• Trastorno por Atracón de baja frecuencia y/o duración limitada: Se cumplen todos los criterios del trastorno por atracón, excepto que ocurre con menor frecuencia y/o por un período inferior a tres meses.
• Bulimia Nervosa de baja frecuencia y/o duración limitada: Se cumplen todos los criterios de la bulimia nervosa, excepto que los episodios de atracón y las conductas compensatorias inapropiadas ocurren con menor frecuencia y/o por un período inferior a tres meses.
• Trastorno de Purgas: Comportamiento recurrente de purga para influir en el peso o la forma corporal, en ausencia de episodios de atracón.
• Síndrome de Alimentación Nocturna: Episodios recurrentes de alimentación nocturna, que pueden manifestarse comiendo después de despertarse del sueño o con un consumo excesivo de alimentos después de la cena. Este comportamiento no se explica mejor por influencias ambientales o normas sociales y causa un malestar o deterioro significativo en la persona. Tampoco se explica mejor por otro trastorno de salud mental.

Señales y síntomas

Favor tener en cuenta, aunque estos son síntomas comunes, no todas las personas con OSFED presentan todos estos signos y síntomas.

Signos y síntomas emocionales y conductuales

• Preocupación excesiva por el peso, la forma corporal y la apariencia, lo que lleva a conductas de restricción o dietas para promover la pérdida de peso.
• Pérdida de peso drástica.
• Vestirse con capas de ropa para ocultar la pérdida de peso y/o mantenerse abrigado.
• Obsesión con el peso, la comida, las calorías, los gramos de grasa y las dietas.
• Se niega a comer ciertos alimentos y, a menudo, elimina grupos enteros de alimentos (carbohidratos, grasas, etc.).
• Hace comentarios frecuentes sobre sentirse “gordo” o tener un peso alto, a pesar de haber perdido peso.
• Se queja de estreñimiento, dolor abdominal, intolerancia al frío, letargo y/o exceso de energía.
• Niega sentir hambre.
• Episodios de atracones, ingiriendo grandes cantidades de comida en un corto período de tiempo, a menudo en secreto.
• Evidencia de conductas de purga, como frecuentes visitas al baño después de comer, signos y/o olores de vómito, presencia de envolturas o paquetes de laxantes o diuréticos.
• Incomodidad al comer en presencia de otras personas.
• Desarrollo de rituales alimentarios (por ejemplo, solo come un tipo de alimento o grupo de alimentos, mastica en exceso, no permite que los alimentos se toquen entre sí.
• Saltarse comidas o tomar porciones muy pequeñas en las comidas regulares.
• Seguir dietas de moda, eliminar grupos enteros de alimentos o adoptar el vegetarianismo/veganismo con el objetivo de perder peso.
• Miedo a comer en público o con otras personas.
• Robar o acumular comida en lugares inusuales.
• Beber cantidades excesivas de agua o bebidas sin calorías.
• Uso excesivo de enjuague bucal, mentas y chicles.
• Esconder el cuerpo con ropa holgada.
• Mantener una rutina de ejercicio excesiva y rígida, a pesar del clima, la fatiga, la enfermedad o una lesión, debido a la necesidad de "quemar calorías".
• Crear horarios o rituales para hacer tiempo para episodios de atracón y purga.
• Aislarse de amigos y actividades habituales.
• Apariencia hinchada debido a la retención de líquidos.
• Revisarse con frecuencia en el espejo para detectar supuestas imperfecciones en su apariencia.
• Después de los episodios de atracón, participar con frecuencia en conductas compensatorias como vómito autoinducido, uso de diuréticos/laxantes, ayuno/restricción, ejercicio excesivo o manipulación de la dosis de insulina.
• Cambios de humor extremos.

Signos y síntomas físicos

• Fluctuaciones notables en el peso, tanto aumento como pérdida.
• Peso corporal generalmente dentro del rango "normal" o con sobrepeso.
• Calambres estomacales y otros problemas gastrointestinales in-específicos (estreñimiento, reflujo ácido, etc.).
• Irregularidades menstruales, amenorrea primaria o secundaria (no iniciar el ciclo menstrual o pérdida del ciclo menstrual) o solo experimentar la menstruación al tomar suplementos hormonales.
• Dificultad para concentrarse.
• Anomalías en los análisis de laboratorio (anemia, niveles bajos de tiroides y hormonas, potasio bajo, recuento bajo de glóbulos, frecuencia cardíaca lenta).
• Mareos.
• Desmayos/síncope.
• Sensación constante de frío.
• Problemas para dormir.
• Cortes y callos en los nudillos (resultado de inducir el vómito).
• Problemas dentales debido a la purga, como erosión del esmalte, sangrado de encías/enfermedad periodontal, sensibilidad a la temperatura, caries, decoloración de los dientes, boca seca, agrandamiento de las glándulas parótidas/submandibulares y dificultad para tragar.
• Piel seca.
• Uñas secas y quebradizas.
• Hinchazón alrededor de la zona de las glándulas salivales.
• Vello fino en el cuerpo  (lanugo).
• Adelgazamiento del cabello en la cabeza, cabello seco y quebradizo.
• Caries o decoloración de los dientes debido al vómito.
• Debilidad muscular.
• Piel amarillenta (cuando se consumen grandes cantidades de zanahorias).
• Manos y pies fríos, moteados o hinchados.
• Cicatrización deficiente de las heridas.

Condiciones que pueden coexistir

• Trastornos de ansiedad, incluyendo el trastorno de ansiedad generalizada, la ansiedad social, las fobias, el trastorno de pánico y el trastorno de estrés postraumático.
• Depresión y otros trastornos del estado de ánimo.
• Trastornos del control de los impulsos (conductas sexuales de riesgo, conducir en estado de ebriedad, robo en tiendas, etc.).
• Trastornos por consumo de sustancias.

Tratamiento

El tratamiento de OSFED requiere trabajar con un equipo multidisciplinario de profesionales de la salud física y mental con experiencia en el tratamiento de los TCA. Este equipo de tratamiento puede incluir un médico, un psiquiatra, un psicoterapeuta y un nutricionista. Dadas las graves consecuencias físicas y psicológicas que pueden derivarse de los trastornos alimentarios, es fundamental buscar ayuda profesional lo antes posible. Se ha demostrado que la intervención temprana es un factor importante para mejorar los resultados del tratamiento.